Te lo sintetizo en tres líneas:
✅ Honrar el fracaso
✅ Validar tu miedo y ver en qué punto te está paralizando.
✅ Correrte del resultado para dar lugar al derecho fundamental del amar y ser amado.
Ahora te lo cuento en 3 párrafos:
El fracaso tiene algo valioso:
Lo intentaste. Por eso, antes de comenzar no quiero dejar de reconocértelo. Ante un fracaso nuestro cerebro naturalmente proyecta ese pasado como un posible nuevo futuro. Eso, es el miedo. El mensajero que viene a visitarte del futuro (incierto, por cierto) a decirte que allá una nueva perdida de algo importante para ti.
muchas veces se arma este círculo:
Fracasé en el pasado y a toda costa evito lo mismo en el futuro. Este ciclo es lo que le ha permitido al ser humano aprender, sobrevivir y así evolucionar. ¿Pero que pasa cuándo esto nos pasa en cuestiones que no son de vida y muerte, cómo por ejemplo en el amor?
Pasa que nos paralizamos, que dejamos de entregarnos a aquellas cuestiones que no podemos controlar.
¿Y entonces, que hago?
Córrete por un instante del mundo en blanco y negro: Del exitoso o fracasado, del casado o divorciado, Del correcto o el equivocado y pone foco en ese derecho innato que tienes como ser humano: AMAR y SER AMADO.
¡Dale! Córrete del resultado, date el derecho a amar y volver a ser amado.
Si te gustó este contenido, en Filialis te ofrecemos un espacio de contención, donde vas a sentirte acompañado y comprendido.
Si te gustaría incorporar estas y otras herramientas de coaching y gestión emocional, súmate ahora a nuestro programa FAMILIAS FUERA DE SERIE. (Fecha de inicio 19/5, vacantes limitadas)
Te vas a llevar herramientas concretas de coaching para recuperar tu bienestar emocional y el de tu entorno familiar.
✔️Son 6 encuentros grupales y tienes la opción de sumar 4 encuentros individuales con un coach asignado.
✔️Es online, por zoom.
Toda la info acá QUIERO VER MÁS INFORMACIÓN
TAMBIÉN te invitamos:
+ a UN CORREO DE DISTANCIA, y recibe nuestros contenidos y propuestas destacadas del mes que te permitirán mejorar tu calidad de vida.